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LA IGLESIA MELQUITA
La historia de la Iglesia Bizantina comienza en los relatos bíblicos. Como día fundacional es considerado el día de Pentecostés en que el Espíritu Santo descendió en forma de lenguas de fuego sobre los Apóstoles reunidos en Jerusalén. El testimonio personal de los Apóstoles sobre la doctrina recibida de Cristo, sumada a su condición de testigos oculares de Cristo Resucitado y la Gracia del Espíritu Santo que permanece en ella desde el día de Pentecostés, fueron y siguen siendo los pilares fundamentales de la Iglesia. |